sábado, 27 de diciembre de 2014

Puedes percibirme a través de esa enorme red de mentiras
como la deformada y espantosa criatura que soy.
Supongo que algunos lo llamarían hipocresía,
y no les faltaría razón.

Dices:
"Mañana será otro día"
Piensas:
"Mañana a esta hora estaré muerta"

Dices:
"Tienes toda la razón del mundo"
Piensas:
"Gente como tú pudre éste mundo"

Te tiran un piropo,
dices:

"Gracias"

Piensas:

Maldito imbécil prepotente, ingenuo, creído,
¿Está ciego o pretendía insultarme?
¿Qué clase de insulto cínico es ese?
¿Pretendía hacerse el gracioso?
¿Será cuestión de sarcasmo y seré yo la subnormal que no le ve la gracia?
Y si no, qué maldito listón mas bajo, hasta ese punto hemos llegado.
¿Ya hay gente por ahí que se tiraría cualquier cosa, incluso a mi?
Qué maldita tristeza de gente, pero qué pena de juicio, qué asco de mundo.
¿Dónde ha quedado la intelectualidad? ¿Tan caras están las gafas?
¿Acaso pretendía hacerme un favor? En plan; voy a alegrale el día a la vaca esa,
así me siento más filantrópico haciendo una buena obra desinteresada sin esfuerzo.
O quizá sea cuestión de estadística, y el tipo va por ahí regalando piropos a cualquiera
a la espera de dar con el porcentaje que le siga la corriente y tal vez llegar a algo con cualquiera. 
O será más simple y espera recibir un piropo a cambio para subirse la autoestima
y eso explicaría que piropease a gente como yo, porque las tias buenas no van por ahí 
repartiendo halagos a cualquiera, y eso lo sabe el más tonto. 
En cualquier caso, menudo subnormal. 


1 comentario:

escupe.