Bitácora de la catástrofe.
Dia...creo que 5. Puede que 6.
No sé, el caos densifica el tiempo.
A los que estáis acudiendo desde fuera
a los medios oficiales como la televisión
para informaros de lo que pasa en Valencia,
os aviso de que os están mintiendo.
Podéis creeros el relato
con el que más cómodos os sintáis,
pero os aseguro que los muertos son miles.
No paran de sacar cadáveres de los garajes.
El hedor a muerte se mezcla en las calles
con el de la basura que se amontona
tras días sin que nadie venga a recogerla
y que se va sumando a los escombros.
Ningún servicio cualquiera del ayuntamiento
se ha dignado a presentarse desde la tormenta,
incluso en zonas como la mía
donde hay acceso y caminos despejados.
La policía sólo está para joder,
y no veréis a ninguno con el uniforme sucio.
Las ayudas donadas que envían no llegan.
Protección Civil está desviando los camiones
a naves privadas donde sólo almacenan
la maquinaria de valor, que no están usando,
y tiran la ropa y la comida.
Se sigue negando la ayuda de los voluntarios,
que vienen a pie sorteando a las autoridades
que tratan de detenerlos y hasta los multan.
No quieren que vengan, aunque hacen falta.
Es surrealista.
Los civiles se han organizado esta tarde
para que los recursos lleguen a la gente.
Han comenzado a llevar los camiones
con los recursos que la gente ha donado
a las casas falleras, a modo de almacén,
porque todo lo que llega al ayuntamiento
o a cualquier tipo de autoridad,
se desvanece en la nada
y no llega a ningún sitio.
(No donéis nada, ni enviéis nada,
por ningún medio del Estado.
Tampoco a ninguna ONG.)
Mañana empezarán a repartirlo por las calles,
directamente desde los camiones,
a megafonazo, los civiles.
Porque es la única manera.
Hay embalses distribuyendo
agua contaminada a una población
que está respirando putrefacción.
La epidemia está a la vuelta de la esquina,
los comercios vacíos, las ratas por las calles.
No hay cojones a salir por la noche,
entre los robos, los asaltos, los gritos...
la jungla.
Al menos se aseguraron de arreglar la red,
para que los medios pudiesen retransmitir
la visita de los políticos y los reyes
que nadie pidió.
No os preocupéis,
que la policía se llevó los coches
de los voluntarios que había allí ayudando,
para que sus majestades tuviesen
el camino despejado a su llegada.
Esos coches acabaron en un almacén,
a varios kilómetros y con su respectiva multa.
(¿Eso lo dijeron en las noticias?)
Sí que había grúas para eso.
Para despejar los caminos y las casas,
para ayudar a la gente atrapada, no tanto.
Y luego dicen que es la extrema derecha
la que tira barro a sus majestades.
No el pueblo, indignado y abandonado.
Claro. Me parto.
Os aseguro que este caos es inédito
y la mierda repetitiva que vomitan las noticias
no llega ni a versión edulcorada de la realidad.
En fin, seguiré informando desde la zona cero,
mientras busco en Google cómo hacer
una pistola casera de autodefensa.
No sea que me cruce con un político o un rey.
Esa peña es peligrosa y da miedo.