Acuden a mí.
Me preguntan.
No sé qué responderles.
Yo no participo,
sólo observo.
No puedo explicarles.
Me aíslo.
Joder,
dejadme en paz.
No os soporto.
Siento asco.
Y luego culpa.
Como si fuera culpa mía
que me deis asco todos.
No me gusta...
sentir.
Es insoportable.
Pero siguen viniendo
con sus malditas preguntas.
Sé tu misma y quien te quiere le bastará tu presencia, no tus respuestas
ResponderEliminarni tan siquiera que hables... solo eso todo eso.
Un abrazo
Espero que tantos lobos no te impidan identificar a los corderos, que esos sí que importan.
ResponderEliminarCulpa?
ResponderEliminarPor?
No les respondas. O les respondes que tienes el COVID; quizá así...
ResponderEliminarLas personas no entienden de espacio y de respeto
ResponderEliminarCuídate