Encontraré la manera,
la actitud,
las palabras.
la actitud,
las palabras.
Y luego lo haré.
Y cuando esté hecho,
ya no existirá.
No solucionaré el problema.
Pero ya no será mi problema.
-Lejos!-
Todo eso sucederá
en cuanto logre dejar de llorar
y consiga las fuerzas
para salir del baño
como si nada pasara
una vez más.
Entonces sí,
entonces seré imparable.
Como en un par de horas.
Le calculo.
Más o menos.
Joder, esta semana ha sido mortal.
Y reconozco que hoy
la he liado parda.
La derrota es atronadora
hasta ensordecer.
Dos horas.
Me concedo dos horas
para conseguir dejar de querer morir.
Y si en dos horas no lo he conseguido,
vamos viendo.
Lo renegociamos o algo,
a ver qué tal.
Ahora llora, prenda.
Ahora que nadie ve
el patético desastre que eres.
Hala, hala.
Ridícula.
Mira hacia adelante, eso es, con todas tus fuerzas.
ResponderEliminarTrabajando en ello estoy
EliminarParece una mujer sabia.
ResponderEliminarPrenda y ridícula?
ResponderEliminarQué va!!!
Tú no te miras bien eh...
Cosas que heredé y se me escapan cuando me hablo a mí misma con condescendencia y asco jaja
EliminarA veces parezco mi abuela.
debo de dormirme es tardísimo y sigo leyéndote
ResponderEliminarCuidado; si lees mucho a los locos, corres peligro de caer en la locura.
EliminarVengo desde el blog de Julio Alcalá. Tu comentario me enganchó. Quizás porque me vi reflejada en él.
ResponderEliminarNo sé si se logra dejar de querer morir cuando esa tentación se vuelve un recurso, una posible solución (no hablo de ti, sino de mí). Tiene un defecto: es el último recurso y no tiene vuelta atrás. Por eso llorar sirve. Distraerse. Desahogar escribiendo o como sea. Con suerte, en medio de todo eso nos encontramos con alguna risa que nos haga olvidar esa tentación.
Un abrazo
El comentario del que hablas es sólo un reflejo de lo roto que está mi humor de mierda xd
EliminarPensamos bastante parecido, será la depresión hablando por nosotras? O que hemos alcanzado la iluminación y esa es toda la maldita y única verdad de la existencia?
Nunca sabremos.
que maravilloso es este blog tan intensamente divino
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