sábado, 1 de septiembre de 2012

cobre


Raros signos, señales torcidas.
Cae la última antena.
El cielo se dobla.
Debajo, el mundo empieza a quebrarse.
La vida termina.
El tiempo de escapar ha llegado,
¡abajo las cámaras...!

Recuerdo mirar alrededor, 
y ser incapaz de reconocer nada.
Su mano se mantiene firme sobre mi brazo.





Elegimos el silencio.
La noche y su frío.

Ahora ya es tarde.
El fin golpea a la puerta, 
listo para reclamarnos. 

"Bebe" dijo, "Bebe de ésta sangre, 
y seremos inmortales..."

Sabía a cobre. 




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