lunes, 29 de agosto de 2022

 Estás en Minecraft, 
siendo feliz. 
- modo creativo, 
nada de supervivencia - 

De repente aparece una 
pantalla azul de la muerte
con un mensaje que te indica
que te has quedado sin espacio. 

Sutilmente te propone borrar
otros programas "más innecesarios"
para liberar memoria
y te saca al menú de inicio.
 
Sientes un nudo en el estómago 
y entras corriendo para comprobar
si se ha guardado la partida. 

Tras un par de eternos minutos de carga, 
el mundo que estabas construyendo 
se genera lentamente frente a ti
gracias a todos los dioses 
del maldito universo
que saben muy bien 
que tu miseria vital está tan al límite 
que un suceso así 
es más que suficiente 
para arrastrarte al suicidio
de inmediato. 

Y entonces, 
sólo entonces, 
eres consciente de que llevas ahí
más de cuarenta horas seguidas 
y ya es lunes y tienes que trabajar, 
pero sobre todo y más importante: 
comprar un disco duro externo. 


miércoles, 24 de agosto de 2022

El edificio en el que vivo
es un panal de avispas locas
dividido en celdillas de paredes finas, 
donde he construido mi nidito de paz, 
entre el bullicio de los humanos. 

Del techo y las paredes
vienen los ecos del infierno. 
Atraviesan la estructura 
desde las celdillas aledañas 
para dejarme claro que estoy
en una trinchera 
en mitad de una guerra
de la que no participo
y que no entiendo. 

Desde aquí puedo estudiarlos. 
He aprendido insultos nuevos 
entre los gritos y los golpes. 

No son familias. 
Es gente que decidió reproducirse
y con ello, de alguna manera, 
se encadenaron entre sí para siempre, 
antes de darse cuenta 
de que no se soportan. 

No son felices. 

Algunos me saludan en el ascensor,
con una sonrisa tan falsa 
que quisiera fumigarlos
- Por eso dejé de usarlo
y convertí las escaleras
en mi pasadizo de escape.- 

Ellos saben que no soy
una de su especie, 
ni parte de su colmena. 
Soy una abeja entre avispas. 
Yo sólo quiero fumarme unas flores, 
mientras ellos se matan con su aguijón. 

Lo más gracioso es que en este tiempo
habré escuchado una media 
de una pelea al día, 
pero ni una sola noche de pasión. 

¿Será que para ellos 
lo erótico es odiarse? 

Parece que les deja más a gusto 
una buena pelea con cosas volando, 
que un simple y banal polvo de nada. 

Nunca entenderé 
a estos humanos de mierda. 








martes, 23 de agosto de 2022

 - yo,  escuchando a las musas,
imaginando y creando en mi  mente:

50 dibujos, 
20 ilustraciones, 
15 recetas de galletas, 
8 maneras de sobrevivir al apocalipsis, 
5 formas de triunfar en YouTube,
3 tatuajes, 
2 películas 
y 1 videojuego. 

- Las voces en mi cabeza:

*Qué buena idea. 
Pinta bien. 
Deberías hacerlo, 
tú puedes. *

- Yo, automáticamente :

*¿¡QUIÉN COÑO ERES
Y QUÉ COÑO HAS HECHO
CON MIS VERDADERAS VOCES!? *

*pánico*

sábado, 20 de agosto de 2022

¿Qué fue primero... 
la evasión o la soledad?
¿... Estuviste sola desde el principio
porque sólo leías, escribías y dibujabas?
¿O lo hacías compulsivamente
para encerrarte en ti misma
porque no podías manejar tanta soledad?

- Me río yo de la del huevo y la gallina. 
(El huevo fue primero, ez). 

Llevo escribiendo diarios 
desde que aprendí a escribir. 
Son testigos supervivientes 
de la masacre de mi vida. 
Los acumulé durante años 
en el que ahora llamo 
"el baúl de la vergüenza". 

Muchas veces he pensado en quemarlos. 
 
No pondré fechas ni nombres. 
Mirad esta mierda:


5° de primaria:

- [...] Hoy I* me ha enseñado los dibujos 
que S* y las tontas del grupito hicieron de mí
antes de entrar a clase, eran horribles. 
Entonces I* me ha dicho que no me pusiera
triste, que yo era la que mejor dibujaba 
de todos los cursos y tenía que vengarme
dibujándolas a ellas para reírnos un rato, 
a mi me daba miedo por si los veían, 
pero ella me ha prometido que eso 
quedaba entre amigas
y que nunca se iban a enterar. 
En el recreo, las dos nos hemos puesto 
a dibujarlas muy feas y a escribirles insultos,
luego I* se ha guardado todos los dibujos
porque decía que le hacían mucha gracia 
y que esas cerdas se lo merecían. 
Al salir de clase, S* y el grupito 
me estaba esperando 
en el callejón de las escaleras,
I* les ha enseñado los dibujos que yo había
hecho, pero no los que había hecho ella, 
y les ha dicho que los había cogido
de mi mochila directamente. 
S* estaba furiosa, se ha puesto roja 
y E* ha empezado a decirle que no podía
permitir que la marginada les hiciera eso 
a todas ellas, así que me han pegado, 
me han roto los cuadernos, 
y los han tirado por el descampado.  

[...] Después S* le ha dicho a I* 
que como agradecimiento por avisarles 
de lo que yo había hecho, la iban a aceptar
en el grupito de las populares, 
y que tenía que dejarse el pelo largo. 



- Yo sé por qué soy un monstruo.

martes, 16 de agosto de 2022

Estoy mal, y eso está mal.
Hay que estar bien, es obligatorio. 
Pero estoy tan jodidamente mal, 
desde hace tantísimo tiempo, 
que me da vergüenza reconocerlo
y ya ni siquiera estoy segura de saber 
qué es exactamente "estar bien", 
solo sé que nadie debe descubrirme nunca. 

Mi plan es, a grandes rasgos, 
fingir que sé nadar mientras me ahogo, 
rodeada de gente que cree que sé nadar
y no se da cuenta de que me estoy ahogando. 

Simplemente aprender a nadar 
por mí misma y sin ayuda de nadie 
antes de ahogarme del todo, 
o morir en el fondo. 

No es orgullo, es que  
si no puedes salvarte a ti mism@, 
eres una carga para el resto. 

Y de todos modos 
nadie puede nadar por ti. 

No hay otra alternativa,
salvo, quizá, la fortuna 
de llegar a arrastrar conmigo
a alguien que se lo merezca. 
Aunque eso me hace preguntarme
si el mundo se merece que le libre 
de un solo hijo de puta. 

Qué más da, 
nada marca la diferencia
en un mundo tan putamente masificado. 

Analizando la situación fríamente, 
quedan pocos segundos de oxígeno 
en mis exhaustos pulmones, 
y ni he aprendido a nadar todavía, 
ni sé cuántos metros de agua 
tengo por encima ahora mismo, 
pero está claro que suficientes 
como para no ver más que oscuridad
y empezar a dudar 
de si alguna vez
estuve en la superficie. 



[...] 



- Y no, esto no es un grito de ayuda. 
Sólo una reflexión estúpida 
en un blog de mierda 
como parte de la nota suicida 
más larga y patética 
de todos los tiempos. 

No os flipéis. 





miércoles, 10 de agosto de 2022

Me pidió ayuda así que,
después de una mañana extenuante, 
decidimos celebrar el éxito de la misión 
y fuimos a mi cueva a distendirnos.

Es jodido porque estás ahí, 
en tu nido, 
acabas de poner tu culo 
en el cojin que tienes en el suelo, 
justo en tu rincón, 
donde el sofá hace esquina. 

Con la consola encendida, 
un café caliente frente a ti
y un peta a punto de ser prendido. 

Es perfecto
Tu maldito lugar seguro. 
Con uno de los dos amigos que tienes. 

No esperas un ataque, 
ni fuego amigo. 
No tienes activados los escudos. 

Terrible error. 

De la nada: 
- "¿cómo llevas lo de K?"-

No fue malintencionado. 
No lo hizo a drede. 
No pretendía que esas palabras
se sublimaran en el aire 
hasta solidificarse en forma de cuchillo
y atravesaran mi pecho 
con la velocidad de una bala. 

Bloqueé ese tsunami de dolor
que agrietaba la presa de mis ojos. 

Sonreí. 
Y luego le mentí. 
Le dije que lo llevaba bien
Y se lo creyó. 

Porque soy un monstruo
con la capacidad de mentir 
a ese nivel de veracidad, 
con tal de no abrir esa puerta
Sin importar nada 
ni nadie. 

Cuando se fue, 
me arranqué el cuchillo 
y lo tiré al cajón de objetos perdidos. 

Por si lo quiere de vuelta.

martes, 9 de agosto de 2022

 "Igual es mi culpa
por esperar algo de ti."

Traducción:

- Es todo culpa tuya. -

OK.
Da igual, estoy cansada.

A quién le importa. 
---> ¿quién lo iba a entender 
de todos modos?

Dostoyevski ya habló 
de cómo la tolerancia llegaría a tal nivel,
que las personas inteligentes 
tendrían prohibido pensar 
para no ofender a los imbéciles. 

visionario.

Y no es que yo sea 
precisamente inteligente. 
Es que sencillamente estoy
rodeada de imbéciles. 

- ¿No te pasa que 
estás ahí tan tranquil@, 
y de repente te das cuenta 
de que has tenido la mandíbula apretada
los últimos veinte años? 

miércoles, 3 de agosto de 2022

 Momentossurrealistasdeesosde
OHDIOSMIOTIERRATRÁGAME
YPORQUÉNOMESUICIDÉALOSQUINCE. 

Mi trabajo tiene sus cosas. 
Por ejemplo, tienes que hacerlo todo
absolutamente perfecto a la primera. 

No puedes fallar:
Cagarla significa literalmente 
joderle la vida a alguien. 
Así que no, el error no es una opción. 
Aunque lleves más de una década, 
siempre hay cierta presión. 

-La línea no puede vibrar o moverse 
ni medio milímetro de su lugar. 
Hay que calcular en todo momento
el ángulo de incisión de la aguja, 
la profundidad a la que percute, 
la velocidad de la máquina, 
la de tu mano, tu pulso, 
mantener la piel estirada, 
que no se te borre la plantilla... 
Y un jodido largo etcétera. 

Eso significa que 
absolutamente toda yo, 
hasta el último átomo de mi ser, 
están puestos al cien por cien
en todo maldito momento
en el pedazo de piel que tú, 
como cliente, me has dado. 

Tú dejas de existir, yo dejo de existir, 
el mundo a nuestro alrededor 
es absolutamente nada en esas horas,
sólo existen la aguja y el trozo de piel. 
Me convierto en la puta línea 
que estoy trazando. 
No tengo cuerpo. 

Para mí, claro. 
Tú estás jodido y sufriendo,
y todo debe parecerte más real que nunca. 

Pero yo, no soy consciente 
de dónde estoy apoyando mi codo. 
Porque ni siquiera estoy siendo consciente
de que hay un cuerpo humano ahí abajo,
o de que yo tenga un codo. 
Eres un mueble sobre el que hay un lienzo. 
Yo estoy a lo mío, ignorando tus lloros. 
Focalizada en que quede perfecto. 

Y no, no me he dado cuenta
de que me estaba apoyando o dónde. 
No me he dado cuenta hasta que
teníamos montada 
la tienda de campaña* 

- Joder, ya me podría haber dicho algo, 
en plan, "cuidado donde te apoyas", 
¿no? 

Y ahora quiero 
que nos muramos los dos.
Y quiero creer que él también. 

Menos mal que ya estaba terminando, 
porque no ha habido dios en la galaxia
que me devolviera el pulso después de eso. 
Qué vergüenza he pasado.

Qué vergüenza. 
Qué vergüenza. 
Qué vergüenza. 

Ahg. 

Que alguien me mate, 
por favor.