miércoles, 15 de diciembre de 2021

 Dulce sufrimiento... 
¿Por qué hacerse daño? 
-Vuelves a empezar.-

Solo soy un ser sin importancia. 
Sin él, soy un poco paranoica
y deambulo sola por esta tierra. 

(Un último baile...
para olvidar mi inmensa tristeza.)

Remuevo el cielo, el día, la noche.
Bailo con el viento, la lluvia. 
Un poco de amor, una pizca de ... 

Y bailo. 
Y en el ruido, 
corro y tengo miedo. 
¿Ya es mi turno? 
Viene el dolor. 
Me dejo llevar... 
Y vuelo
¡Cuanta esperanza! 
En este camino. 
En la ausencia. 

Por mucho que me esfuerce, 
mi vida es sólo una 
decoración







jueves, 9 de diciembre de 2021

Hasta la persona más
MEDIOCRE
necesita sentirse 
ESPECIAL
de vez en cuando. 

martes, 9 de noviembre de 2021

Chaval... te voy a 
VIOLAR
 tan fuerte
que Irene Montero 
tendrá que 
dimitir

lunes, 13 de septiembre de 2021

Odio a tus amigos.
Odio a tu papá y a tu mamá. 
Espero que ellos me odien también. 
Supongo que estoy siendo honesta 
por una vez. 
Te debe estar 
ocurriendo algo muy malo
para querer estar conmigo. 
Es un poco dulce. 

Charlotte Lawreence
Why do you love me

miércoles, 11 de agosto de 2021

 A lo mejor si soy feliz,
pero asintomática. 

lunes, 26 de julio de 2021

 Todo es veneno y nada es veneno, 
sólo la dosis hace el veneno.

Paracelso 
(1943-1541)

sábado, 10 de julio de 2021

 Charla distendida con mi colega el flaco.
En algún punto de la conversación, me cuenta lo contento que está porque finalmente subió de 64kgs, celebrando que con mucho esfuerzo está consiguiendo engordar un poco y se ve mejor.

Me contagia por un momento su alegría por el tema, y se me ocurre compartir la mía:

Cuando le digo que yo por fin he bajado de 60kgs, pierdo el control de la conversación.

Se le tuerce la expresión y empieza a decirme escandalizado que medimos lo mismo, y que aunque él sea un hombre y yo una mujer, sigue siendo demasiado poco para mí estatura. Que lleva ya mucho tiempo pensando que estoy muy flaca, y que siempre ha pensado que tengo algo mal en mi cabeza con el tema. (lol). 
Me echa la charla. 

No se cómo me escabullí de eso.
Aquí sigo, esquivando balas que yo misma disparo, no puedo bajar la guardia ni un segundo.


miércoles, 7 de julio de 2021

miércoles, 30 de junio de 2021

 La tipa hablando: 

"Su problema es que ella no tiene amigos."

-Verás campeona... 
Eso que tú identificas como 
"el problema", 
en realidad NO ES
"el problema",
sino el síntoma y la consecuencia
del verdadero problema. 

lunes, 21 de junio de 2021

 Llevo todo el día con un tremendo
BLOQUEO ARTÍSTICO.
Estoy hecha mierda, a punto de acostarme, 
son las doce y media de la noche.
Y ahora, precisamente AHORA
me llega la inspiración
y brotan las ideas,
los demonios se callan 
para dejar espacio a las musas.

Funciona así.
No es como si pudiera acostarme 
y dejar las ideas aparcadas para mañana.
Porque mis neuronas vibran 
y se van intensificando, 
acumulando toda esa energía creativa
que sólo puedo liberar dibujando.

Porque llevo todo el día mirando
el infinito blanco del papel vacío, 
tirando un boceto detrás de otro
a la puta basura.

Y ahora que me había rendido
empiezo por fin a escuchar la música.

Así empieza otra noche insomne más. 

domingo, 20 de junio de 2021

AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHH!!!!!!



domingo, 13 de junio de 2021

 ¿Quién recibiría tu rabia?
¿Un ladrón? ¿Un pederasta?
¿Un... Líder mundial?
Ésta decisión traiciona todos los secretos
y desvela tus verdaderas intenciones. 

Pregúntate, en ese abismo oscuro:
Dispuesto a atacar a tiro certero... 
¿A quién matarías? 

Respóndeme y yo 
le daré a tu rabia una voz con fuerza 
para que la oiga el mundo. 

Y recuerda que
la crueldad te hace parecer débil. 






 De cuando perdimos al ajedrez. 

 ¡¡¡TÍO, TÍO!!!

¡¡¡CUIDADO BRO!!!

¡¡¡QUE SE TE VEN LOS SENTIMIENTOS!!!




domingo, 6 de junio de 2021

Quizá sea demasiado tarde para ser feliz. 

miércoles, 2 de junio de 2021

 
Todos hemos pasado por este camino
una o dos veces...
Juro que pensé que nunca 
iba a volver a casa. 

Paciencia.
-Se que es bastante difícil para ti. -

 Vengo con las manos vacías.
El suelo está callendo 
justo donde estoy retrocediendo. 

-¡Solo estoy lejos en la oscuridad! 

Todos ellos hablan 
acerca del día que caí. 

A veces me paro frente a la multitud... 
Quebrantada
Yo fui de ellos una vez. 

Nunca me tomé el tiempo 
mientras estuve allí. 
Yo nunca los dejaré...
No, nunca los dejaré intensificarse. 




miércoles, 21 de abril de 2021

 
te mereces
todo lo malo que te pasa.





domingo, 18 de abril de 2021

 ¿Qué pasó en este lugar?

*Un golpe furioso*

-No deberías estar aquí.
No deberías recordar.

¿Qué pasó...?

*golpes, golpes! *

Los demonios están inquietos.
No les gusta este lugar. 

Hace años estuve aquí.
Intenta recordar, RECUERDA!

Es una puerta sellada que no consigo abrir.
Hay dragones al otro lado. 
 No todo el mundo
obtiene lo que se merece.

Consiguió su sueño*

- ¿es feliz?

NO LO PARECE. 

sábado, 17 de abril de 2021

 Movidas que se descontrolan.

Dios mío,
¡Que alguien llame a alguien...!

Necesito que se acabe 
este día infinito. 







viernes, 16 de abril de 2021

 A éstas las llamo
  "ojeras de artista".
Que no duermo bien y la vida me estresa. 
Que no me sale de los cojones maquillarme,
y estoy cómoda con una sudadera gigante 
llena de años de desgaste nada lujosa
y me importa una mierda. 
Que el look femenino es incómodo 
y tengo frío. 
Siempre tengo frío. 
Y estoy cansada. 
Si parezco una vagabunda ya me da igual. 
Nunca me importó demasiado. 

Que la inspiración siempre llega
a las 3 de la mañana, 
y tengo que estar ahí para cazarla en el papel, porque es mi maldito trabajo, joder. 
No es estar guapa para que tengas 
algo bonito que ver mientras te pincho. 

Las miraditas de desaprobación 
os las podéis meter bien profundo por el recto. 
Y dejad un hueco ahí adentro 
para esos comentarios jocosos de
"con lo guapa que eres, si te arreglaras..."
en caso de que vuestra cabeza 
no esté ocupando ya todo el espacio
en vuestro maldito culo. 

Putas zorras de uñas monstruosas
y pestañas de plástico. 
Dejadme en paz joder. 



martes, 13 de abril de 2021

- Hablemos de la soledad.

Hablo mucho sola.
Es el resultado 
de pasar muchas horas sola. 

(!) No se lo digas. 
¿Qué haces

Lo cierto es que llevo haciéndolo
desde que era bastante pequeña. 
Resulta que me gusta hablar,
lo que no me gusta es la gente. 

BAH!

- De alguna forma se acabaron generando distintos alter egos que construían una conversación. 

*CONVERSACIONES AL VACÍO.*

Que patética. 

Dejó de ser un monólogo, ¿entiendes? 
Pero la costumbre... 
En fin, fueron cogiendo fuerza. 
Se acabaron "independizando" 
de mi psique. 

VOCES. 

Rápidamente comprendí 
que la gente te mira con malos ojos. 
Suponen que estas loco si se te escapa
alguna respuesta en público. 

- ¿Estás loca? 

No. 
No así, al menos. 
Yo las genero y de alguna forma, controlo. 
Me gustaría que fueran reales. 

*mentira*
A veces.
 
No, en realidad no me gustaría.
Pero están ahí. 
Me hacen compañía. 

Hasta trabajando. 
Dibujando, pero también tatuando.
Las mejores conversaciones 
las he tenido en mi mente, en mis mundos, 
mientras trinchaba a alguien. 
Si pudieran escuchar mis pensamientos... 

Pobres incautos incapaces
de perturbar mi soledad. 
Llorad fuera de mis cascos, 
a millones de kilómetros de mi. 

Cada pensamiento tarda un segundo
en vomitar el siguiente. 










 Y mientras tanto, yo:


Abro WhatsApp, busco la conversación.
Descargo las fotos de referencia. 
Las paso al correo, las abro desde el pc.
Busco nuevas referencias para refinar. 
Comparo y filtro, descargo.
Voy al escritorio en busca del photoshop. 
Pero la app de Discord no está de acuerdo.
No hay escritorio, sólo Discord bloqueado.
No hay tiempo para reiniciar.
Busco en inicio el photoshop. 
Se me crashea el cerebro y pincho illustrator.
El illustrator tarda un siglo en abrirse. 
Se peta el pc un rato. Se termina de abrir y lo cierro. Sigo buscando el puto photoshop.
Discord sigue petado. Ventiladores a tope. 
La clienta de los cojones escribiendo por WhatsApp porque un punto de medio milímetro se le ha borrado y es un drama.
Ganas de presentarme en su casa 
y tirarle mi portátil a la cabeza. Paso de ella. 
Busco las fotos de nuevo en el móvil. 
Las abro con el editor de fotos de mierda
del móvil que no sirve para nada. 
Retoco y monto como tristemente puedo
mientras se reinicia el portátil. 
Las mando al correo, (otra vez). 
*un millón de actualizaciones pendientes más tarde* Espero a que encienda. 
Las descargo ya medio retocadas, 
el photoshop no quiere arrancar. 
Al final tardo menos dibujando a mano. 
Más clientes escribiendo. 
Todos quieren cita el mismo día. 
Por supuesto en fin de semana, porque a nadie le importa si no tengo días libres. 
Aún no me he podido ni duchar. 

Se me van dos horas 
y no he terminado
de empezar a currar. 

La vida es así. 
Y así no se puede. 


lunes, 12 de abril de 2021

 Oh God...

Qué dolor de estómago joder.


-Deja de atracarte por las noches
como un dinosaurio.
Graaaaciaaaaas. 

viernes, 9 de abril de 2021

 A esta hora solo quedamos despiertos
los gilipollas del Rocket League. 

viernes, 2 de abril de 2021

032 073 032 100 111 110 039 116 032 103 105 118 101 032 097 032 115 104 105 116

miércoles, 31 de marzo de 2021

"Todas tus buenas cualidades
se oscurecen por culpa 
de tu gran inteligencia, 
y se vuelven inútiles para el mundo
simplemente por tu rabia
de querer saberlo todo
mejor que los demás."

Johanna Schopenhauer
(a Arthur) 

 - Tu llamada a las armas 
sigue resonando. 

Oh... ¿Puedes oírlo...? 

¿DE DÓNDE VIENE ESE SONIDO? 

Parece un eco agónico 
atravesando montañas de tiempo. 
Ya no le queda poesía. 

Tu voz se está pudriendo
antes que tu cerebro. 

Cuando llega hasta aquí 
NO ES MÁS 
QUE UNA
INTERFERENCIA. 




martes, 30 de marzo de 2021

No llores. No llores. No llores. No llores.  
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores. 
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. No llores.
No llores. No llores. No llores. Joder. 

sábado, 20 de marzo de 2021


 Que se me va a ir la olla
y no os estáis dando cuenta,
Joder. 

 Oh, y la zorra de la clienta.
Mención honorífica para ella,
por sus largos e intensos días 
manteniendo firmemente
una gran actitud de
TOCAPELOTAS

Porque yo a lo mejor no soy normal,
pero cuando voy a un restaurante
trato a todos los camareros 
con el mayor de los respetos.
No por educación, 
sino por un sencillo principio que dicta
que si no quieres ingerir fluidos humanos
tratas bien al que te sirve la comida.
Es muy básico y aplicable a todo. 

Si la comida te puede sentar mal días, 
un peluquero que te hace un mal corte se soluciona en un mes... 
¿¿¿Y tú tienes las pelotas de joder a quien te tatúa????
Que te puedo joder de por vida,
¿Ésto es en serio?

Te lo replanteo, maja:
¿De verdad quieres ir el resto de tu vida
con una polla oculta a simple vista
tatuada en tu brazo para que se vea
a 3 metros de distancia?

NO jodas conmigo,
que ya estoy muy harta de la vida, 
y no os dais cuenta de que tengo
muchísimo poder en mis manos
cuando os entregáis a mi.

Vivís sumergidos en
EL PUTO ESTADO DE CONFIANZA.
No entiendo cómo seguís con vida.

Me tienes hasta los cojones. 

martes, 16 de marzo de 2021

 Un mensaje inesperado ilumina la pantalla, un mensaje de sólo tres palabras. 
-Es mi colega hecho polvo.-

Él forma parte de un selecto grupo de personas, mi más cercano e íntimo círculo. 
Son un pequeño grupo privilegiado, 
no rompo mi soledad por cualquiera. 

En la acogedora seguridad del refugio, 
santuario y templo sagrado que es mi cueva, 
la cafetera ronronea en el fuego. 
Mi colega se lía un may mientras me describe un amargo relato repleto de giros inesperados y caprichosas desgracias. 

El llanto contenido en su voz. 
La humedad en sus ojos. 
La sonrisa forzada, 
como tratando de restar importancia. 
El humor como estrategia defensiva. 
Manos temblorosas, nerviosas, 
buscando algo a lo que aferrarse. 
Mirada huidiza, posición corporal tensa. 

Escucho atentamente sin mediar palabra
mientras preparo y sirvo el café. 
Durante un largo rato lo observo liar, 
pero no lía. 
Mantiene el may en la mano, 
a medio hacer, 
sin terminarlo. 

Revive los hechos según los relata, 
y aunque se esfuerza mucho en disimularlo, 
puedo ver claramente que está afectado. 
No digo nada, sigo escuchando y le lío uno, 
se lo prendo y se lo paso encendido. 
A cada calada va desapareciendo el llanto contenido, noto cómo se calma levemente. 
La postura tensa se va relajando, 
comienza a mantener la mirada, 
la falsa sonrisa va desapareciendo. 

Para cuando lo apaga en el cenicero ya no hay velos ni pantomimas, el tono del discurso es más crudo, sincero, sin filtros. 
Se muestra vulnerable y sin tapujos. 

Puede que sea por el may y el café. 
O porque le escucho sin juzgarle. 
Tal vez solo necesitaba desahogarse.

Soy la única persona 
que le ha preguntado si estaba bien. 

Joder. 

Lo cierto es que yo siempre escucho.
En este pequeño círculo siempre soy yo a quien acuden en confidencia cuando en las horas bajas buscan cobijo emocional. 
Cuando necesitan a alguien 
a quien confiar un secreto, 
derramar lágrimas 
o reformular la realidad 
para dar sentido a la existencia. 
Irónicamente. 

Me pregunto qué pasaría 
si les hiciera yo lo mismo. 
Si les vomitara encima toda la oscuridad
que ellos apenas intuyen
que siempre he llevado dentro. 

Creo que fliparían. 


lunes, 15 de marzo de 2021

He empezado a pensar que 
la soledad es una entidad por si misma.

- ¡Cuidado! Disocias.
Es por el modo en que te relacionas con tu entorno, quién sabe desde cuándo...
... O por qué. ¿Por qué? 

Es como un fluido denso.
Todos respiran oxígeno alrededor, 
mientras tú atraviesas el océano 
aguantando la respiración 
caminando bajo el agua. 

- Sola. 
NO, 
SIEMPRE.

Cuando la soledad viene todo se densifica. 
El agua que atravieso parece mantequilla. 

- Como el petróleo adherido 
a cada centímetro de existencia. 

Aquí en el fondo es difícil moverse. 
Todo el peso del mar sobre tu cabeza. 
Está oscuro, hay depredadores abisales. 

- Pero la soledad trae luz.
Te empuja a la introspección. 
Indaga de nuevo. 
Cómo cuando eras pequeña. 

Oh no. En la introspección estoy yo. 
Y no estoy segura de querer encontrarme. 

Demasiados años de entrenamiento. 
Demasiada soledad. 

-¿Autocompadecencia a éstas alturas? 
¿En serio? 

NO. 
Cuando más tiempo pasé sola
más tiempo quería estarlo. 
Es curioso. 
Ahora lo ansío. 




viernes, 12 de marzo de 2021

Te recuerdo.
Porque hay una canción 
que me recuerda a ti.
Y tú no lo sabes.
Sólo una pregunta:

Si la máquina de la farmacia me quita centímetros a placer, (porque varía desde 1,72 hasta 1,75)....
¿Quién me asegura a mí que no me está quitando también kilos?
En ese caso estaría pesando mucho más de lo que pone ahí. 

Imposible fiarse.
La máquina miente.



NO ES
SUFICIENTE.
Objetivo: - 19

-me miro en el espejo y me veo igual que cuando pesaba casi 100 kgs. 

jueves, 11 de marzo de 2021

 No hay suficiente cafeína en el mundo
como para sacarme de encima este cansancio. Estoy agotada.
Y ayer me perdí en el súper por un momento, porque no consigo concentrarme.
Voy como atravesando la niebla.
Sólo quiero dormir.
No pido tanto.


miércoles, 10 de marzo de 2021

 Verás, 
a veces crees que es jueves en miércoles.

Porque tienes tantas cosas en la agenda
que el móvil se declara en huelga. 

Y mañana tendrás 
que vivir de nuevo este miércoles. 

Con todo su estrés,
ansiedad y angustia.
Por dos.
Otra vez.

Porque hoy no era jueves.

Despierta o desaparece ya, coño.
Maldición.
Hostia, joder.
Mierda. 

martes, 2 de marzo de 2021

lunes, 1 de marzo de 2021

Adiós para siempre bestgore.

Nunca se te olvidará. 

Literalmente. 

miércoles, 24 de febrero de 2021

 Mierda.

He respondido la llamada que no era. 

Joder lo odio todo. 

sábado, 20 de febrero de 2021

Un número desconocido ha estado llamando.
Durante una semana, cuatro o cinco veces al día.
Cada vez que el móvil sonaba me moría un poco más, no he contestado ni una sola vez.
Es decir, nada bueno sucede nunca. 
No tiene sentido esperar otra cosa que no sean problemas, y a estas alturas cualquier problema que llegue nunca es pequeño o manejable, conocerlos no hace que pueda solucionarlos, solo me acerca un poco más al borde del precipicio. Llevo demasiado tiempo en zona límite, no puedo permitirme ni un paso más hacia el abismo, ya no queda suelo sobre el que caminar.
Así que he dejado saltar el contestador cada vez, y he ignorado los mensajes. 
Parece fácil pero me ha consumido mucho. 
A medida que se acumulaban las llamadas se iba incrementando mi ansiedad, como en una olla a presión. A finales de semana ya ni siquiera podía estar en la misma habitación que el móvil, y el sonido de la vibración... Joder, así debe sonar el infierno.
Vivir es luchar, incluso cuando parece que solo te estás dejando llevar/arrastrar por la vida, lo estoy asumiendo, siempre fue una batalla. Y una de las pocas armas que me quedan es el autoengaño.

Convencerme de que el móvil dejará de sonar. Que eventualmente la persona del otro lado desistirá, se acabará rindiendo, quien fuera que me buscase tendría que darme por muerta en algún momento (y entonces tampoco le faltaría razón).
Pero el autoengaño es una espada que he blandido durante demasiados años y empieza a perder su filo.

El móvil seguía sonando, 
y paulatinamente fui enloqueciendo.

Apenas he podido dormir, me he comido las uñas hasta el hueso, sobreviviendo por el día a base de café y esperando a que acabe la jornada laboral de todo el mundo, no sólo la mía. Porque quien sea que esté llamando dejará de hacerlo cuando el sol se ponga y la gente regrese a sus casas. 

Con la promesa del silencio en la noche, parecía un cadáver en el trabajo. Completamente ausente, una vez más mi cuerpo estaba allí funcionando en automático mientras mi mente ardía lejos, en un infierno metafísico que mis clientes estaban lejos de percibir. 
Puedo perdonarme por eso sin autocompadecerme porque soy buena en lo que hago, y son demasiados años como para poder hacerlo perfecto aún estando absorbida por mi angustia.

Pero entonces llega la ansiada noche, y con ella termino de trabajar y miro con miedo el móvil, descubriendo nuevas llamadas perdidas y mensajes en el buzón de voz. 
Para entonces estoy tan cansada y débil que, aunque sabía que el golpe vendría, es demasiado fuerte y me deja temblando. 
Acabo devorando media caja de cereales antes de caer muerta en otra secuencia de horas interminables de agónico insomnio. 
Cada-maldita-noche. 
Luego me siento tan culpable que tengo que incrementar las horas de ejercicio hasta que me duele el cuerpo tanto como la mente. 

Y entonces suena el timbre. 

Estoy sola, no espero a nadie. 
Me da un microinfarto, como el torrente de adrenalina que imagino que tu cuerpo segrega para activar la respuesta de huir o luchar cuando se encuentra de frente con una manada de leones rabiosos. 
Paso de mi estado habitual de alerta constante al pánico más absoluto, algo me dice que quien sea que me ha estado llamando, está ahora mismo en la maldita puerta de mi casa. Y estoy acorralada. 

Tardé unos segundos en reaccionar. 
Todos los sonidos del mundo fueron sustituidos por un pitido constante cuando escuché mi nombre al otro lado del telefonillo desde una voz desconocida. 
Ni siquiera recuerdo haber descolgado, y no entiendo por qué abrí la puerta, fueron decisiones que no recuerdo haber tomado. 
Pero lo hice, y un tipo enorme con una prominente barba asomando bajo su mascarilla me lanzó una mirada fulminante. Repitió mi nombre, asentí con la cabeza y me tendió un paquete. Era el repartidor de aliexpress. Cuando lo fui a coger empezó la reprimenda más lógica del universo, he de reconocer. 
Aunque debía ser pocos años mayor que yo, me echó la bronca como si yo fuera una niña, de verdad estaba enfadado, fruncía el ceño mientras me contaba la de veces que me había llamado para confirmar que estaría en casa el día de la entrega del pedido. Y aunque el pedido se había retrasado mucho - tanto como para olvidarlo- y en cierto sentido era yo la que tenía que estar enfadada por eso, además de la ironía de tener que aguantar la reprimenda del tipo, lo cierto es que me sentía tan jodidamente aliviada que no podía parar de sonreír bajo mi mascarilla. 
Fue como si hubiese estado aguantando la respiración bajo el agua durante toda la semana y de repente poder sacar la cabeza a la superficie. 

Acepté con gusto la bronca, me disculpé mil veces, pedí perdón... Pero me reservé el prometer que no volvería a pasar. 

El móvil ha dejado de sonar. 
Nunca más voy a pedir nada por Internet. 
No puedo con la vida. 



viernes, 19 de febrero de 2021

jueves, 18 de febrero de 2021

 Ha habido cambios.
No se como explicarlo.
Estoy asustada -eso no ha cambiado-
y confusa. 

¿Es así como empieza el final?

Muchas cosas siguen igual, 
supongo que me resulta más fácil empezar por esas porque las tengo más claras, imagino que por costumbre.

La ansiedad sigue dominando mi existencia. 
El miedo, la sensación de amenaza constante, de ser juzgada y señalada, el estado de alerta permanente. 

Los pensamientos intrusivos se han intensificado, en potencia y frecuencia. Todavía puedo encerrarlos en lo profundo de mi mente cuando los detecto, pero han empezado a afectarme físicamente. Cuando uno de esos pensamientos se me cuela siento un golpe en el pecho y el corazón se me acelera, se me pone la piel de gallina y me cuesta respirar, me cuesta minutos meterlo en su cárcel mental y estabilizarme de nuevo, nunca había percibido una respuesta física tan agresiva. 

También sigo teniendo problemas con la comida pero es como si hubiera olvidado todo lo que mi trastorno alimenticio me había enseñado todos estos años. 
No pierdo peso.
No gano peso. 
¿Estabilidad o estancamiento?
Se debe a un cambio de actitud que no controlo ni comprendo, estoy dejando de vomitar y de ayunar. A cambio estoy haciendo más ejercicio, vivo de café con leche de almendras y sacarina por el día, y por la noche... La noche ya no es refugio.
En realidad ya nada lo es. Todo lo prohibido resurge y me arrastra. 
¿Por qué me comporto como si creyese que hay un futuro? ¿Es el engaño de la promesa de estabilidad?
 No me reconozco a mi misma actuando de esta forma, no se qué hacer, solo quiero adelgazar hasta morir, ¿por qué no estoy haciendo exactamente eso? ¿Qué me pasa? 

El vacío se expande, las horas de soledad lo apaciguan y alimentan a partes iguales.
Siempre me he llevado bien con mi soledad, eso no es un problema, pero no recordaba lo fuerte que suenan los golpes en la puerta que sella mis demonios cuando estoy sola. 
No se si ellos son más fuertes, o yo soy más débil. No sé qué pasará cuando rompan las cadenas y salgan en estampida, o si lo harán algún día. La caja de Pandora es un triste chiste al lado de la mía. 







miércoles, 10 de febrero de 2021

 https://youtu.be/k6j4jrszKNQ


La verdad es que yo siempre 
estuve del lado de Knives.

domingo, 7 de febrero de 2021

 Miro alrededor y veo el mundo arder. Es algo así como lo que siempre había querido. 
Pero en lugar de avivar las llamas y regocijarme ante el espectáculo, me pongo a actuar como mi propia némesis y sobrevuelo el desastre mirando hacia otro lado. 

Es casi como si estuviera intentando vivir, pero juro que es sin querer. 
¿Será algún tipo de mecanismo de supervivencia extremo e inconsciente que se activa cuando estas tan al límite que en realidad hace ya días que saltaste del acantilado? 

miércoles, 3 de febrero de 2021

 Te sorprendería ver
cómo los problemas desaparecen
cuando los ignoras.

Una enorme bola de mierda surca el espacio en colisión directa, pero bah.
Es problema de la "tú" del futuro.

*me estoy volviendo loca*

lunes, 1 de febrero de 2021

 El espejismo de la felicidad me persigue. 

sábado, 16 de enero de 2021


 

miércoles, 13 de enero de 2021

 Me doy cuenta de que 
parezco un ser humano.
Parezco una mujer. 
Parezco sana. 
Parezco cuerda (casi siempre).
Parezco sociable, normal.
Parezco feliz. 
Parezco tonta. 
Parece ser
que se me da bien 
parecer.
Resulta algo perturbador.